Como una "mano pesada que se posa sobre Hong Kong", describe Tobias Brandner la situación de Hong Kong en el artículo "reformiert". Más de 10.000 residentes fueron detenidos cuando Hong Kong se vio sacudido por las protestas en torno a la introducción de la nueva y controvertida ley de seguridad en 2019. Mientras tanto, 300 personas han sido condenadas, entre ellas periodistas y estudiantes. En la actualidad hay unas 8.000 personas detenidas en la ciudad portuaria.
El pastor suizo Tobias Brandner es colaborador internacional de Mission 21. Lleva visitando a los presos en las cárceles de la antigua colonia de la Corona británica desde 1998 y siente los agravios de primera mano. En un retrato publicado en el diario francés "Le Temps", relata que en febrero de 2021 se le asignó por primera vez un representante de las autoridades, que no se apartó de su lado ni siquiera durante las conversaciones con los presos. La confidencialidad fue especialmente importante durante estas conversaciones.
El poder subversivo de la fe
Brandner, que también es profesor de teología en la Universidad China de Hong Kong, pasa el día en la cárcel cinco veces al mes. Mientras tanto, la supervisión ha vuelto a disminuir, dice Brandner en el artículo "reformado", pero todavía no es como antes. Por ejemplo, el capellán siempre tiene que informar de con qué reclusos ha hablado durante sus visitas.
Le Temps cuenta que muchos de los presos políticos son cristianos, entre ellos Jimmy Lai y Joshua Wong. "Esto refuerza mi creencia en el poder subversivo de la fe", sonríe. No confía en el futuro del pequeño territorio, escribe "Le Temps" al final del retrato. No obstante, cree que los habitantes de Hong Kong no abandonarán rápidamente su lucha por la democracia: "Son tenaces y resistentes".
► Artículo en el sitio web "reformiert.info"
► Retrato en la página web del periódico "Le Temps".
► Proyecto educativo de Misión 21 en Hong Kong para el cambio social