El internado pertenece a la Iglesia Presbiteriana. El presidente de la iglesia, Samuel Fonki, explicó que los secuestradores exigieron el cierre de la escuela. El 31 de octubre ya habían sido secuestrados once alumnos, que fueron liberados en ese momento a cambio del pago de un rescate.
La iglesia había reabierto la escuela, a la que asisten más de 600 niños, hace sólo quince días. Con ello, se ha resistido a la demanda de los separatistas de mantener sus escuelas cerradas como expresión de resistencia contra el gobierno central de Yaundé. Al hacerlo, la Iglesia insistió en el derecho humano a la educación.
La dirección de la iglesia emitió un comunicado el martes por la noche. En él, condena el acto y exige que los autores liberen a los secuestrados de forma inmediata e incondicional. La Iglesia hace un llamamiento a las partes en conflicto en Camerún para que respeten la integridad de los escolares. Pide al gobierno que resuelva urgentemente la crisis del país. La Iglesia pide a la comunidad internacional que busque formas de ayudar a la resolución de la crisis.
El presidente de la iglesia, Samuel Fonki Forba, dijo a Mission 21 que ya habían aceptado la demanda de los secuestradores de cerrar la escuela. Los secuestradores dicen ser separatistas, pero su identidad aún no está clara. Los secuestradores enviaron a la dirección de la iglesia un vídeo de unos cinco minutos, que también tiene Mission 21. El vídeo muestra a algunos de los estudiantes intimidados. Fonki explica que el propósito de esto es aparentemente aumentar la presión sobre la iglesia.
El secuestro está relacionado con el conflicto en Camerún entre el gobierno central francófono y las dos regiones anglófonas del oeste del país. El conflicto se intensificó cuando los separatistas declararon la independencia de las regiones el 1 de octubre de 2017. Según las organizaciones de ayuda, más de 400.000 personas han huido a causa del conflicto.
Mission 21 respondió a la difícil situación de la población civil refugiada en el verano de 2018 lanzando un proyecto de ayuda de emergencia y reconstrucción en Camerún, junto con el PCC y la Iglesia Bautista de Camerún. La iglesia tiene un gran arraigo y aceptación entre la población. El proyecto de ayuda de emergencia también incluye medidas para proporcionar educación a los niños y jóvenes refugiados de manera informal. Esto les da la oportunidad de un futuro más allá de la pobreza y la violencia.
► Leer el comunicado de prensa completo
► Declaración de la Iglesia Presbiteriana
► Proyecto de ayuda de emergencia Camerún