Las decisiones del nuevo gobierno estadounidense están teniendo un impacto negativo en la salud de la población mundial. La red sanitaria suiza Medicus Mundi, de la que también forma parte Mission 21, ha realizado un primer análisis de las consecuencias inminentes y lucha contra estos efectos.
La red sanitaria suiza Medicus Mundi advierte de las consecuencias de las decisiones estadounidenses: por ejemplo, peligra la lucha contra el VIH y la malaria. Es posible que aumenten las enfermedades contagiosas y los riesgos para la población, también en Suiza. La red lo expone en un dossier y pide que se aumenten los fondos destinados a la cooperación internacional.
La red Medicus Mundi reúne a más de 50 organizaciones suizas activas en la cooperación sanitaria internacional. Mission 21 también es miembro, publica el análisis en sus propios canales y apoya las reivindicaciones.
Viele Menschen im „Globalen Süden“ sind nun vom Tode bedroht
Jochen Kirsch, Director de Mission 21, subraya que la cancelación de fondos para sanidad tiene consecuencias dramáticas para la población del llamado Sur Global: "Esto afecta, por ejemplo, a importantes medidas para combatir la malaria y la tuberculosis, así como el VIH y el sida. Si, por ejemplo, deja de garantizarse el acceso gratuito a la medicación contra el VIH que salva vidas en varios países del África subsahariana, supongo que cientos de miles de personas enfermarán y morirán de sida en todo el continente."
Los expertos de los países afectados también albergan estos temores. Por ejemplo, el Dr. George Assam, médico de Douala (Camerún) y miembro desde hace años de la junta del Consejo Médico Nacional, nos escribe sobre la situación actual en su país: "La retirada actual de USAID y el fin abrupto del apoyo estadounidense a los programas sanitarios mundiales están teniendo consecuencias devastadoras para Camerún: En todas partes faltan vacunas y medicamentos vitales. Como consecuencia, el programa de lucha contra la malaria en mujeres embarazadas y niños pequeños ha desaparecido por completo. Innumerables bebés y niños pequeños volverán a morir de paludismo. Del mismo modo, la falta de medicamentos contra la tuberculosis y el VIH se cobrará cientos de miles de vidas".
Además de las consecuencias para los individuos afectados, esto también tendría graves consecuencias sociales, afirma Jochen Kirsch: "Sociedades enteras se verían desestabilizadas por el rebrote de la pandemia".
El compromiso de Suiza con la promoción internacional de la salud
También en Suiza se han recortado ya los fondos destinados a la cooperación internacional. El año pasado, el Consejo Federal desvió dinero del presupuesto para cooperación internacional a Ucrania y también recortó las contribuciones de Suiza al programa de la ONU contra el VIH ("ONUSIDA"). Se están debatiendo nuevos recortes. Los recortes a la salud mundial son ahora aún más drásticos a raíz de la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de retirarse de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y suspender los pagos a la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID) durante tres meses.
La red Medicus Mundi pide ahora a las autoridades suizas que aumenten la financiación de la cooperación internacional de forma selectiva. Suiza debería seguir apoyando a ONUSIDA y, en general, hacer más para mejorar la salud mundial y promover una Organización Mundial de la Salud fuerte. Son exigencias que Mission 21 apoya, como explica Jochen Kirsch: "No debemos abandonar a las sociedades de nuestros países socios que de repente se han visto tan golpeadas por la enfermedad y la muerte. Los países ricos como Suiza, que sigue teniendo una fuerte tradición humanitaria, deberían comprometerse más en el apoyo a las personas especialmente vulnerables."