"Quiero crear un "espacio abierto", un espacio en el que la gente pueda conocerse, intercambiar ideas y ser activa", dice January Kristianto. El joven de 28 años es pastor en una congregación de Java Occidental (Indonesia). A su lado se encuentra Abiud Dikasa, de la República Democrática del Congo. Dirige el trabajo de los jóvenes de su iglesia CEK en la provincia de Kwango. "Nunca quise ser profesor, pero cuando vuelva empezaré a dar clases de inglés", dice. "Conocer el idioma es enormemente importante para las generaciones jóvenes". Minha Lee, de Corea, lo asume: "Quiero organizar talleres sobre justicia de género en mi iglesia y en otras iglesias".
January, Abiud y Minha son tres de los 18 jóvenes embajadores internacionales que pasaron más de dos semanas juntos en Suiza e intercambiaron ideas entre ellos.
El Programa de la Embajada de la Juventud ofrece a los jóvenes adultos de África, Asia, Europa y América Latina la oportunidad de conocerse, explorar los problemas más acuciantes de un mundo globalizado y trabajar juntos para encontrar soluciones.
Acciones concretas sobre problemas urgentes
La Cumbre de la Juventud, que forma parte de la Semana de la Misión en Davos, estaba prevista inicialmente como un acto público, pero debido a Corona se celebró entonces como un acto cerrado exclusivamente dentro del grupo de jóvenes embajadores.
La atención se centró en reflexionar sobre los pasos que cada uno puede dar para encontrar soluciones a los problemas más importantes en los respectivos contextos.
De los debates se desprende que el intercambio en el grupo culturalmente mixto proporcionó mucha inspiración y planes. "Fue muy inspirador, aprendí mucho, pero también pude transmitir mi experiencia", dice January. Pronto, los jóvenes adultos de África, Asia y América Latina volverán a casa. En los próximos meses, recibirán a delegaciones de jóvenes embajadores de Europa que viajarán a Costa Rica, Tanzania e Indonesia. El intercambio continúa y la red crece.
