La pobreza extrema se ha reducido a la mitad en todo el mundo en los últimos 25 años. Las nuevas infecciones por el VIH y la mortalidad infantil también han disminuido considerablemente. En la Cumbre de la Juventud, un evento organizado por young@mission21 y los Partidos Jóvenes Suizos, el periodista y economista Markus Mugglin comenzó dejando claro: "Los medios de comunicación se centran demasiado en las malas noticias. En realidad, medido por el nivel de vida, vivimos en el mejor mundo desde la historia de la humanidad". Sin embargo, el mundo es enormemente injusto. La pobreza extrema aumenta en el África subsahariana.
La cooperación al desarrollo puede contribuir a mejorar las condiciones de vida, pero sólo puede tener éxito si es sostenible y se basa en la colaboración. "Además, el Norte global también tiene deberes que hacer. No podemos tener proyectos de desarrollo, por un lado, y empresas de ámbito mundial con sede en Suiza, por otro, que contribuyen a los problemas", como señaló Fabian Ottiger, del think tank de política exterior foraus.
"El fin de la relación madre-hijo"
Tras esta aportación inicial, los participantes pudieron profundizar en sus conocimientos sobre la cooperación al desarrollo en seis talleres diferentes. Por ejemplo, Adina Rom y Selina Bezzola, de la ETH, presentaron datos sorprendentes sobre el progreso mundial en la reducción de la pobreza. En 1960, sólo el 42% de las personas sabía leer y escribir; en 2015, ya era el 86%. Sabine Hohl, de la Universidad de Berna, se ocupó de la ética. Abordó cuestiones como éstas: ¿Estamos obligados a ayudar? ¿Y cómo nos enfrentamos al hecho de gastar dinero cada día en pequeñas cosas que podrían salvar vidas humanas?
Con la pastora indonesia Obertina Modesta Johanis, también estuvo representada una voz del sur global. Compartió sus experiencias de cooperación al desarrollo con Mission 21: "En el pasado, nuestra relación era como una relación madre-bebé. Pero desde hace 15 años he notado un cambio, hoy Mission 21 actúa como un puente y un buen amigo".
Migración y cambio climático a debate
El Embajador Manuel Sager, Director de la COSUDE, participó en la mesa redonda posterior sobre la nueva estrategia de cooperación internacional de la Confederación. Afirmó: "Toda acción política debe ser una expresión de responsabilidad para el desarrollo social y ambientalmente sostenible y no debe ir en contra de sus objetivos.
El hecho de que la COSUDE vincule la política de desarrollo con la migración en su nueva estrategia fue objeto de un gran debate. Se argumentó que era ilusorio pensar que la cooperación al desarrollo podría detener la migración. Muchas personas emigran voluntariamente y no por necesidad. El embajador Manuel Sager dijo: "La cooperación al desarrollo no puede evitar la migración. La COSUDE se ocupa de crear perspectivas sobre el terreno y de ofrecer así alternativas a la huida y a la migración por desesperación".
El cambio climático también fue un punto importante de debate. Un joven dio que pensar con su comentario: "En la actualidad, sólo el 5% de las personas pueden participar en los viajes aéreos. ¿Qué pasará con nuestro medio ambiente si todo el mundo es de clase media?"
El evento mostró la importancia de reconocer que la cooperación al desarrollo no puede resolver todos los problemas. El pueblo suizo y el sector privado están igualmente llamados a aportar su contribución. "Todos somos parte del problema y, por tanto, también debemos ser parte de la solución", dijo el embajador Sager.
Texto: Eva Sidler, Fotos: Misión 21